Hay 450 mil nuevos desocupados
El desempleo escaló casi dos puntos porcentuales en solo seis meses y hay 450 mil nuevos desocupados. Se trata de una aceleración en al destrucción de empleos que solo encuentra parangón en la Pandemia y la crisis de 2018. Los bajos ingresos suman más presión al mercado de trabajo. Por: Alfonso de Villalobos. El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) dio a conocer el informe de Mercado de Trabajo del segundo trimestre de este año según el relevamiento de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH). Allí descolla el salto en la desocupación que creció en 1,9 puntos porcentuales desde el último trimestre de 2023 al promedio del segundo trimestre de 2024. En sólo seis meses el desempleo pasó de afectar a un 5,7% de la población económicamente activa hasta un 7,6%.
Durante el primer trimestre del año, el desempleo alcanzó al 7,7% de las
PEA lo que indica un amesetamiento del fenómeno e incluso una leve
recuperación del empleo que, en rigor, responde a la estacionalidad
propia del mercado de trabajo entre los primeros tres meses y los
segundos de cada año. Si la comparación se realizará en forma interanual
el desempleo escaló 1,4 puntos porcentuales desde el 6,2% que marcó en
el segundo semestre de 2023. Así las cosas y tomando en cuenta la tasa
de actividad del 48,5% que marcó el período se trata de casi 1,8
millones de personas que buscan empleo y no lo consiguen. Por eso, y
tomando en cuenta una tasa de actividad del 48,6% en el cuarto trimestre
de 2023, se trata de 440 mil nuevos desempleados en apenas seis meses, a
razón de 2450 nuevos desempleados por día.
Salto histórico
Para
encontrar un deterioro del mercado de trabajo tan profundo y acelerado
en un período de seis meses, dejando de lado el dato del primer
trimestre que resultó idéntico, habría que retroceder hasta el segundo
trimestre de 2020 cuando, en el peor momento de la pandemia y las
restricciones sanitarias, el desempleo escaló hasta el 13,1% de la
población incrementándose 4,2 puntos porcentuales con relación al último
trimestre del año anterior.
En condiciones normales, otro salto
similar se produjo en el segundo trimestre de 2018 cuando el desempleo
escaló 2,4 puntos llegando al 9,6% desde el 7,2% del último trimestre de
2017. En ambos casos se trata de una suba de la cantidad de
trabajadores desempleados del 33%. Sin embargo, en aquel momento, la
tasa de actividad se ubicaba en un 46,4% y, por lo tanto, en términos
absolutos el registro de trabajadores que perdieron sus trabajos resulta
inferior.
Menos ingresos más búsqueda de empleo
La suba de la
tasa de actividad que se encuentra en máximos históricos, además,
refleja el deterioro de los salarios y los ingresos en general. Es que
el crecimiento de la población económicamente activa indica que los
ingresos de los jefes de familia ya no alcanzan para sostener al núcleo
familiar y más integrantes del mismo se ven obligados a incorporarse al
mercado de trabajo.
De hecho, y en la misma línea, los ocupados
demandantes de empleo llegan al 16% mientras los subocupados demandantes
(que trabajan menos de 35 horas semanales y desean hacerlo más horas)
llegan al 8,1% de las PEA cuando, hace seis meses eran el 15,5% y el
6,8% respectivamente.
Más precarización
Desde el punto de vista
de la informalidad, resulta que el 36,3% de los trabajadores asalariados
revisten dentro de la categoría “sin descuentos jubilatorios”, es decir
no se encuentran registrados debidamente. Se trata de un incremento de
0,7 puntos porcentuales con relación al primer trimestre del año pero
una contracción de 0,6 puntos con relación a lo que ocurría un año atrás
y 2,1 puntos porcentuales por arriba del promedio de los últimos ocho
años.
A la hora de analizar el fenómeno del desempleo por regiones
surge que en el conurbano bonaerense el desempleo afecta al 9,1% de la
población, muy por encima del promedio. Se trata de la región más
complicada detrás del Gran Resistencia donde el 11,1% de la población
que busca empleo no lo consigue y el Gran La Plata donde el desempleo
afecta al 9,9%.