Arde la interna PRO
Bullrich estalló contra un aliado de Larreta por Mendoza. Zoom furibundo y pases de factura: los diálogos de la última mesa nacional del PRO. El tema a discutir era la interna en la provincia radical donde el referente del PRO, Omar De Marchi, quiere romper JxC. "¡Si no te gusta Cornejo, ganale en las PASO!", fue lo más leve que le dijo la presidenta del PRO. Por Werner Pertot. El último Zoom de la mesa nacional del PRO se pareció más a un catch de lucha libre que a un encuentro partidario. El tema a discutir era la interna en Mendoza, donde el referente del PRO, Omar de Marchi, amenaza con romper Juntos por el Cambio y pelearle por afuera a la UCR. Claramente no ayudó que De Marchi forme parte de la mesa de campaña de Horacio Rodríguez Larreta y que la encargada de ponerlo en caja sea la adversaria de Larreta en la interna presidencial, Patricia Bullrich. La reunión terminó en un intercambio subido de tono entre De Marchi y Bullrich.
En realidad, son varias las provincias que enfrentan problemas a la hora
de mantener la unidad de Juntos por el Cambio: en la reunión, se habló
de Mendoza, Río Negro, Neuquén, Chubut y Córdoba. Bullrich se
comprometió con el radicalismo a ordenar las internas en cada caso. Pero
fue Mendoza la que hizo estallar una discusión furibunda, con pases de
factura de todo tipo.
En esa provincia, hace tiempo que el dirigente
que irá por la gobernación, De Marchi, viene poniendo en tensión la
continuidad de Juntos por el Cambio y marcando diferencias con el estilo
de gobierno del gobernador radical Rodolfo Suárez. Todo está listo como
para que De Marchi rompa y, en lugar de competir en unas PASO con un
candidato radical, les compita en las elecciones generales.
De Marchi, aliado de Rodríguez Larreta
En
la última reunión de la mesa nacional de Juntos por el Cambio tanto el
gobernador Suárez como Alfredo Cornejo se quejaron amargamente de los
amagues de De Marchi de romper el frente provincial. Se les sumó, en la
misma línea, el gobernador de Jujuy y titular de la UCR nacional,
Gerardo Morales. En ese contexto, Larreta no dijo nada y Bullrich fue la
que recibió las críticas y se comprometió a hablar con De Marchi y
resolver la situación.
Pero aquí hay que observar cuál es el juego de
alianzas cruzadas que motiva a cada uno de los actores. De Marchi, hace
un tiempo, se sumó a la mesa de armado nacional de Larreta, en
reemplazo de Diego Santilli, que dejó ese rol para avocarse a la campaña
bonaerense que le espera este año para pelear la gobernación. Así que
De Marchi es un aliado de Larreta.
Cornejo, aliado de Bullrich
Del
otro lado del ring, el radical Cornejo se viene mostrando cada vez más
seguido con Patricia Bullrich. Al punto, de que ella explora la idea de
una "fórmula cruzada", en la que Cornejo sea su candidato a
vicepresidente en las PASO nacionales de este año. Cornejo es un aliado
de Bullrich.
Por lo tanto, Bullrich tiene un doble interés en
disciplinar a De Marchi: es un aliado de su adversario interno y
complica la estrategia en Mendoza de uno de sus principales aliados
radicales para las PASO mendocinas, que son el 11 de junio. Cornejo dice
una y otra vez que si se divide Juntos por el Cambio le están regalando
la elección al peronismo.
Con todo esto, Bullrich fue a la reunión
de la mesa nacional del PRO, donde debía tratarse la situación en
distintas provincias. Según testigos, la conversación con De Marchi fue
subiendo de tono. El mendocino argumentó que la UCR mendocina nunca tuvo
intensión de sostener un frente con el PRO, al que ningunea
constantemente. Y se fue poniendo cada vez más intransigente en su
posición y más duro, hasta que tuvieron un intercambio donde ella le
espetó lo del armado de Larreta y hasta amenazó con una intervención del
PRO mendocino. Y él le dijo que ella hace todo para mantener su alianza
con Cornejo. Quedó todo expuesto. El jefe de Gobierno mantuvo silencio
durante todo el intercambio. "La verdad es que Patricia lo mandó a la
mierda a De Marchi. Se nota que volvió recargada de las vacaciones en
Brasil", bromeaban en el PRO.
Luego recompusieron los términos y
quedaron en seguir buscando una solución al conflicto en Mendoza y en
otras provincias donde también la situación camina hacia el quiebre del
frente. Lo que sigue es una reunión de Bullrich con los radicales, la
semana próxima. "De Marchi no va a poder avanzar en hacer lo que a él se
le ocurra", amenazaron desde cerca de la presidencia del PRO. El cierre
de listas es recién en abril, así que habrá tiempo todavía para
negociar.
Lo cierto es que el mendocino se quedó solo: Larreta no
movió un dedo para apoyarlo y tanto Mauricio Macri como María Eugenia
Vidal se alinearon detrás de la posición de Bullrich. El expresidente,
no obstante, no estuvo para el momento donde volaron los ceniceros
(virtuales, porque era un Zoom). Se conectó más tarde, fiel al estilo de
no poner demasiada energía en lo complejo de un armado político.