Reclamo por la soberanía en Lago Escondido
Entre amenazas con armas de fuego, la patota armada de Joe Lewis impidió el acceso al Lago Escondido. Según informaron desde la Fundación Interactiva para Promover la Cultura del Agua (FIPCA), 21 personas fueron retenidas por una guardia del magnate. Fuerte repudio de los organismos de DDHH. La Secretaría de Derechos Humanos de la Nación denunció agresiones y amenazas a un grupo de manifestantes que marchan en reclamo de la soberanía del Lago Escondido. Parte del territorio es propiedad del magnate Joe Lewis desde 1996. "Hace instantes nos ingresaron denuncias de personas que se encuentran en este momento en el camino de montaña rumbo al Lago Escondido, en tierras de Joe Lewis. Más de 40 personas de civil llegaron al lugar con armas de fuego para amenazar y que no continúen la travesía", escribieron desde la cuenta de Twitter de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación. Entre los amenazados estaba el médico Jorge Rachid. "Cabe destacar que ese es un camino autorizado por la Justicia para poder acceder al lago. Ya solicitamos a las autoridades de la provincia de Río Negro que garanticen la seguridad y libre circulación de todos ellos", agregaron.
Según informaron desde la Fundación Interactiva para Promover la Cultura
del Agua (FIPCA), que organiza marchas por la "Soberanía al Lago
Escondido", son 21 personas retenidas por la patota vinculada al
magnate. Los activistas iniciaron el viernes una marcha por la montaña, y
cuando transitaban el Lago Soberanía situado fuera de las tierras de
Lewis, una guardia de 50 personas armadas a caballo y a pie que
responden al inglés, cortaron el camino. Lewis es dueño de casi doce mil
hectáreas en la zona de frontera que rodea el Lago.
En un hilo de
Twitter, desde la Fundación expresaron que "el abogado de FIPCA, Sergio
Cuestas, que integra la marcha para acceder al Lago Escondido por el
camino de montaña, informó que fueron interceptados hoy por la guardia
del magnate británico y les impidieron continuar hasta la costa del lago
público ubicado a 40 km de El Bolsón".
"Se trata de cincuenta
individuos que rodean y hostigan a las y los compañeros que van por la
columna de montaña presionando para que regresen. Ahora se está
presentando un habeas corpus para resguardo de su seguridad", agregaron.
Los
organismos de DDHH se hicieron eco de la denuncia y repudiaron las
agresiones y amenazas en un comunicado. "Desde los Organismos de
Derechos Humanos -sostienen en el texto- repudiamos la acción agresiva
de un grupo armado bajo órdenes de Joe Lewis que ha detenido a la
comitiva en tránsito por Alta Montaña para llegar a Lago Escondido. Al
llegar al Lago Soberania esta comitiva fue interceptada violentamente
con el fin de hacerlos retroceder. Reclamamos a las autoridades
judiciales y del Gobierno de Rio Negro que se les permita su libre
circulación. Lago Escondido es argentino, público y no privado, asi lo
dice un fallo judicial obtenido por el INAI que no se está cumpliendo."
Firman el comunicado Madres de Plaza de Mayo Linea Fundadora; Abuelas
de Plaza de Mayo; Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones
Políticas; Familiares y Compañeros de los 12 de la Santa Cruz; Asamblea
Permanente por los Derechos Humanos; Movimiento Ecuménico por los
Derechos Humanos; Fundación Memoria Histórica y Social Argentina;
Asamblea Permanente por los Derechos Humanos La Matanza; Comisión
Memoria Verdad y Justicia Zona Norte; Liga Argentina por los Derechos
Humanos. Este lunes, además, organizaciones sociales, gremiales y
políticas encabezadas por FIPCA, realizarán "la sexta marcha al Lago
Escondido en defensa de la Soberanía por el camino de Tacuifí", para
reclamar se cumpla el dictamen judicial que impide obstaculizar el
acceso al lago. El abogado integrante de la marcha, Sergio Cuestas, nos
informó que al llegar al Lago Soberanía, unos kilómetros antes de Lago
Escondido, 22 compañeras y compañeros -entre ellxs, el médico Jorge
Rachid- fueron interceptados por la guardia de Joe Lewis, dirigidos por
el representante del magnate inglés, Nicolás Van Ditman. Eran 50
personas armadas a caballo y a pie que no les permitieron seguir
avanzando y con todo tipo de amenazas los intimaron a que regresen. ",
contó en un video el presidente de FIPCA, Julio Urien.
Los compañeros
se tuvieron que retirar, dirigiéndose hacia Cabecera Sur, al sur de
Lago Escondido -cerca de la frontera con Chile-, donde permanecerán
acampando a la espera de que se resuelva esta situación. Cabe resaltar
que dos agentes que los escoltaron en ese trayecto, recibieron órdenes
de abandonar el lugar, dejándolos solos sin ningún tipo de protección,
denunció Urien.
Con el abogado Maximiliano Geido, hemos presentado un
Habeas Corpus ante la Justicia rionegrina para garantizar la integridad
física de las y los marchantes que se encuentran allí y para que se les
permita acceder a Lago Escondido, tal como lo establece la legislación
provincial y la Constitución Nacional", agregó.