Arde Paris
Caos y destrozos en el centro de París en las protestas por el aumento de los combustibles
Crece la tensión política en Francia por el alza de los combustibles y este sábado la gran marcha convocada en París por los llamados "chalecos amarillos", que protestan por la pérdida del poder adquisitivo, terminó en graves incidentes con la Policía.
las fuerzas de seguridad rechazaron con chorros de agua y gases lacrimógenos, en el centro de la capital francesa, a cientos de manifestantes que invadieron la zona de exclusión de los Champs-Elysees.
Hay importantes daños en las vidrieras y en las calles, donde algunos "casseurs" arrancaron adoquines con barras de hierro para lanzarlos contra la policía.
El centro de París está en pleno caos y la policía usa granadas de estruendo para intentar dispersar a los manifestantes.
El
ministro del Interior francés, Christophe Castaner, acusó abiertamente a
la presidenta de Rassemblement National, Marine Le Pen, de haber
"incitado a los desórdenes" exhortando a los "chalecos amarillos" a ir a
los Champs-Elysees, donde había "sediciosos de extrema derecha".
Los
manifestantes también se apoderaron de un vehículo de obras en las
cercanías de los Champs-Elysees, lo arrastraron a centro de la avenida y
lo incendiaron frente al restaurante Le Fouquet's.
Según Castaner se
trata de unos 8.000 manifestantes, entre los cuales fueron detenidos
unos ocho. En todo el país, según el ministerio del Interior, son unos
23.000 manifestantes, una cifra mucho más baja que los 282.000 de hace
una semana.
"Esta es la movilización del pueblo, aunque el gobierno
quiera hacer creer que se trata de gente de extrema derecha y que son
pocos numerosos", aseguró el presidente de la izquierda radical France
Insoumise, Jean-Luc Melenchon.
El presidente Emmanuel Macron,
buscaría a principios de la próxima semana tomar la iniciativa con un
nuevo paquete de medidas sociales, en medio de
Así lo señalaron
medios locales que destacan que el martes próximo el mandatario hará un
conjunto de propuestas para que la transición ecológica sea lo menos
dañina posible para los ciudadanos más vulnerables.
Eso puede incluir
ayudas al aislamiento energético de los edificios, así como a los
desplazamientos laborales, que se sumarían a las ya anunciadas en los
últimos días por el gobierno, que descarta renunciar a la anunciada suba
de los impuestos de los combustibles.
La estrategia de transición
ecológica impulsada por Macrón, en la que se inscribe esta alza, busca
inducir al menor consumo de combustibles fósiles, según informó Le
Figaro.
Aunque no quiere dar marcha atrás en su idea de mantener una
política impositiva ecológica, el martes puede lanzar propuestas para
que sea "justa, equitativa y democrática", y no descarta el diálogo con
los "chalecos amarillos", según fuentes del Eliseo.
Los mensajes del
Ejecutivo han ido en los últimos días en la dirección de calmar el enojo
de los manifestantes, la mayor parte de ellos concentrados en la
Francia de provincias, lejos de los grandes núcleos urbanos.
Quizá por ello, para que el sentimiento de malestar se acerque al poder, convocaron esta manifestación en París.
Las
autoridades tratan de enmarcar lo más posible ese movimiento, que
carece de organizadores y no está respaldado oficialmente ni por
partidos ni por sindicatos y que se reivindica exclusivamente ciudadano.