La pobreza alcanza a casi la mitad de los niños del país
Según la UCA, la pobreza alcanza a casi la mitad de los niños del paísLos más perjudicados
Las políticas de ajuste de Cambiemos impactan especialmente sobre los chicos: según el Barómetro de Deuda Social de la Infancia de la UCA, el 48,1 por ciento de los niños y niñas argentinos vive en condiciones de pobreza. El 33,8 por ciento desayuna, almuerza y merienda en comedores escolares o de organizaciones barriales.
Un nuevo informe de la Universidad Católica (UCA) reveló que el 48,1 por ciento de los niños y niñas de la Argentina vive en condiciones de pobreza y que un tercio de ellos debe asistir a comedores comunitarios para alimentarse. La investigación que ilustra los efectos de las políticas de endeudamiento, ajuste y despidos de Cambiemos en el sector más vulnerable de la sociedad, la infancia, precisa además que solo el 38,5 recibe los 1577 pesos que el Gobierno les da en concepto de la Asignación Universal por Hijo (AUH).
El Barómetro de Deuda Social de la Infancia de la UCA que será
presentado esta tarde y, cuyo adelanto fue publicado por varios
matutinos, destacó que el 28,1 vive en hogares con necesidades básicas
insatisfechas y que, como consecuencia de ello, el 33,8 por ciento
desayuna, almuerza y merienda en comedores escolares o de organizaciones
barriales.
Este número señala que durante el último año hubo un
aumento de casi 8 puntos en la cantidad de chicos y chicas que deben
acudir a organizaciones educativas y sociales, que son las mismas que a
diario se movilizan hasta distintos organismos del Estado en demanda de
un aumento de subsidios y creación de puestos de trabajo. La mayoría de
ellas integra el espacio que a finales de mayo pasado organizó la Marcha
Federal que demandó la sanción de la postergada ley de emergencia
alimentaria.
El estudio de la UCA realizado tras un relevamiento en
5700 conglomerados urbanos precisó también que los chicos y chicas de
hasta 17 años que viven en situación de indigencia alcanza al 10,2 por
ciento medidos en términos de ingresos de sus familias, y que el 22,5
vive en condiciones de hacinamiento.
En cuanto al hábitat, el
Barómetro de Deuda Social de la Infancia reveló 51,3 por ciento de los
niños, niñas y adolescentes de todo el país vive barrios con severos
índices de contaminación ambiental y problemas de saneamiento. La zona
más afectada es el Conurbano bonaerense, donde la pobreza llega al 54,2
por ciento.
Respecto de la salud, los números también encienden las
alertas. El 80,9 por ciento de los chicos de los sectores más
vulnerables solo puede atenderse en hospitales públicos y la salitas
barriales por las cuales los gremios de médicos y enfermeros reclaman
mayor financiamiento.
En lo que se refiere a educación, el
relevamiento destacó que el 49 por ciento de los alumnos de las escuelas
públicas no accede o dejó de acceder a las nuevas tecnologías. Al
respecto cabe recordar que el presidente Mauricio Macri decretó el mes
pasado el cierre del programa Conectar Igualdad, que durante el gobierno
anterior proveyó de netbooks gratuitas y contenidos digitales a 5
millones de estudiantes de toda la Argentina.
Los datos que
demuestran que la pobreza no dejó de subir coinciden con los recortes a
la asistencia social, el congelamiento de las paritarias y los tarifazos
que en ese mismo período carcomieron los salarios de los trabajadores
formales e informales. También con la devaluación del peso, el cierre de
fábricas y los despidos masivos en los sectores privado y estatal.