CONVERGENCIA AL SERVICIO DEL DERECHO SOCIAL A LA COMUNICACIÓN
CONVERGENCIA AL SERVICIO DEL DERECHO SOCIAL A LA COMUNICACIÓN. Por Luis Lazzaro
El mundo avanza hacia la consideración del acceso a la banda ancha como parte del derecho humano a la comunicación y a la libertad de expresión, a la regulación conjunta del espectro radioeléctrico y las redes de fibra óptica, así como al establecimiento de un marco civil de Internet que asegure la neutralidad en la web.
Argentina debe caminar en esa dirección. Toda reforma en este sentido es bienvenida y necesaria. Su propósito debe ser colocar en el centro del debate el acceso y participación de los ciudadanos en los contenidos de la red como ámbito de promoción del desarrollo humano, de la cultura, la producción y la creación audiovisual nacional. Ese camino requiere de políticas públicas integradoras que articulen toda la capacidad técnica, productiva, científica y de inversiones al servicio de una infraestructura nacional de servicios convergentes que promuevan la producción nacional y la accesibilidad social.
Ello supone desarmar una madeja de regulaciones e intereses corporativos para que el centro del debate sean la inclusión y el interés nacional.
La puja entre corporaciones multimedia y grupos de telecomunicaciones por el control de los mercados convergentes es de vieja data. Ha sido abordado con detalle en "La batalla de la Comunicación"* y diversas publicaciones académicas, así como en los documentos fundacionales de COPLA y en su publicación de octubre de 2011**.
Ese análisis y el estudio de la legislación comparada internacional
aconsejaron en 2009 que las regulaciones del sector audiovisual
desarmaran los monopolios sectoriales (Clarín, Telefónica, Telecom) para
crear un escenario democrático, competitivo y accesible en las
plataformas de comunicación, al servicio de los ciudadanos. No fue
posible entonces una regulación que articule telecomunicaciones y
servicios audiovisuales.
A más de 4 años de sanción de la Ley 26.522
de Servicios de Comunicación Audiovisual, mientras se mantiene pendiente
la adecuación de las principales empresas del sector, las
telecomunicaciones continúan regidas por una vieja ley de la dictadura
de Lanusse (Ley 19.798, emparchada y retocada) y el mercado de acceso a
Internet y servicios conexos sigue en poder del mercado concentrado. Si
bien es mucho lo avanzado en estos años, especialmente en el ámbito
público de los medios audiovisuales, el fomento a los contenidos, la
infraestructura de Televisión Digital Abierta y las redes de Argentina
Conectada, una profundización convergente parece necesaria.Al respecto consideramos necesario avanzar en el debate de un nuevo marco regulatorio con atención de algunos principios:
1.-
La libertad de expresión y el derecho humano a la comunicación
requieren hoy tanto del acceso ciudadano al audiovisual como a las
redes de alta velocidad.
2.- La infraestructura de las comunicaciones debe ser un servicio público a disposición de los ciudadanos.
3.-
Toda re-regulación del mercado de las comunicaciones debe asegurar
principios de competencia, universalidad, no concentración y libertad de
elección de los usuarios.
4.- Medidas activas para el respeto a la
privacidad de las personas, la inviolabilidad de los datos y la
soberanía de los Estados.
5.- Políticas que estimulen la producción y circulación de contenidos nacionales y latinoamericanos en una red globalizada.
6.- Centralidad y articulación de la política pública para un desarrollo competitivo, federal y con propiedad diversificada.
7.-
Principios regulatorios de propiedad cruzada que impidan posiciones
dominantes y protejan a empresas pymes y de la economía social.
8.- Neutralidad de la red para impedir la discriminación de contenidos por velocidad o precio.
9.- Accesibilidad para que todos tengan derecho a participar, compartir, crear y distribuir información.
10.-Promoción de una gobernanza multilateral de la red con respeto a la legislación internacional sobre derechos de autor.
Luis Lazzaro.
* La Batalla de la Comunicación. De los tanques mediáticos a la ciudadanía de la información. 2010.
**
Militancia y Comunicación. Ideas, herramientas, gestión. Copla. Octubre
2011: "la necesidad estratégica de una política pública articulada en
el campo de la comunicación (recomienda) la creación de un Ministerio de
la Comunicación con plena capacidad sobre el espectro en toda su
dimensión, la infraestructura global del transporte y distribución de
contenidos, las políticas audiovisuales hacia los tres actores centrales
del proceso (medios comerciales en competencia, medios comunitarios y
medios públicos) y la gestión integral de la comunicación, incluyendo la
publicidad y el fomento. En otras palabras la conducción de la
convergencia tecnológica para que sus beneficios se traduzcan en
apropiación social y no solo en la privatización de la renta, deben ser
parte de una política pública y de un nuevo estatuto de regulación.
07/05/2014 (1905)
