Devaluación
Devaluación: Gobierno negocia un muro de dólares a cambio de eliminar la regla que alimenta el carry trade. ámbito.com | Julián Guarino. El ministro Luis Caputo quiere una pared de dólares del FMI, ahora. Promete hacer las modificaciones con el dólar. La idea es alejarse del momento electoral. El paquete financiero con el FMI alcanzaría los u$s20.000 millones, combinando dinero fresco y refinanciación bajo un esquema que incluye algo parecido al Plan Brady 2.0. El gobierno de Javier Milei ultima los detalles de un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), un paso decisivo para consolidar una barrera financiera –un "muro" de dólares – que contenga las presiones cambiarias antes de las elecciones legislativas de octubre.
El dato central es que ese muro tiene, para el Gobierno, una forma
asimétrica, una mayor dimensión de desembolsos en el arranque, ahora,
muy pronto, un final en el tiempo menos pretencioso. Es decir, el
ministro Luis Caputo quiere que le adelanten los fondos que,
supuestamente, deberá utilizar para el repago al propio FMI. El dinero
es fungible, se sabe, y los DEG del FMI pueden mimetizarse en el
maelstrom de las reservas del BCRA. Los lineamientos principales del
programa –monto total, tasa de interés y esquema cambiario– dicen en la
Casa Rosada, están definidos, aunque resta precisión sobre el desembolso
inicial, clave para estabilizar las reservas del Banco Central y evitar
una escalada del dólar paralelo. En el Gobierno señalan que, por estas
horas, el staff del FMI analiza informalmente el caso argentino, pese a
que la reunión no aparece en su calendario público, un indicio de la
urgencia que imprime el gobierno a las negociaciones. Ámbito contactó
hoy con fuentes oficiales del organismo que dijeron no tener información
de ese encuentro.
El entendimiento, enmarcado en un programa de
Facilidades Extendidas (EFF), contempla un préstamo estimado entre
u$s10.000 y u$s20.000 millones, con una tasa del 5,63% –inferior al
6,46% del acuerdo previo– y un período de gracia de cuatro años y medio.
El objetivo formal es recomponer las arcas del Banco Central, que cerró
2024 con reservas netas negativas por u$s6.200 millones, y honrar
compromisos con el propio Fondo, cuyo vencimiento de capital asciende a
u$s4.500 millones este año. Sin embargo, el foco real está en el "muro":
un desembolso inicial robusto que permita desactivar el crawling peg
del 1% mensual, desandar la liquidación del dólar blend y transitar
hacia una flexibilización del cepo cambiario sin desatar una corrida.
El
nuevo acuerdo con el FMI, la clave para el Gobierno en las reservas.
Trascendidos recalan por estas horas en la figura de Scott Bessent,
secretario del Tesoro de Estados Unidos, quien, según entienden las
fuentes consultadas, le habría recomendado al ministro Luis Caputo
acelerar los ajustes en el programa financiero y económico, y hacerlo
ahora, con la finalidad de destrabar este desembolso clave del FMI antes
de que las tensiones cambiarias se agraven.
La coyuntura apremia. En
las últimas dos semanas, el Banco Central sacrificó más de u$s1.200
millones para mantener a raya al dólar paralelo, que roza los $1.300,
mientras la brecha con el oficial supera el 20%. Con las elecciones
legislativas a siete meses, el Ejecutivo requiere una inyección
inmediata de divisas para ganar margen de maniobra. La estrategia
incluye adelantar modificaciones en la política cambiaria, buscando
evitar una economía turbulenta y una presión inflacionaria más alta en
la previa electoral, en un contexto interno y externo que observa con
atención el desempeño del Gobierno. El presidente Milei anticipó que el
anuncio oficial podría concretarse a mediados de abril, aunque el FMI
mantiene cautela: la revisión informal de esta semana precede a una
votación definitiva aún sin cronograma, dejando al mercado en un compás
de espera que podría extenderse hasta 20 días.
El acuerdo también
tiene implicancias externas y domésticas. En el ámbito internacional, el
gobierno confía en el respaldo de Estados Unidos, que controla el 16,5%
de los votos en el directorio del FMI y cuenta con el aval implícito
del G7. Si bien el ministro Luis Caputo descartó viajes inmediatos a
Washington, el embajador Gerardo Werthein intensifica contactos para
asegurar el apoyo político, una gestión que cobra relevancia tras las
recomendaciones de Bessent.
Para los mercados, el tamaño del "muro"
será determinante. Analistas de J.P. Morgan y Bank of America observan
un virtual repunte en los ADR argentinos, con subas del 5% en las
últimas jornadas, pero advierten que un desembolso inicial inferior a
u$s5.000 millones podría desencadenar una reversión abrupta. El riesgo
de que la situación social se agrave también planea como un factor que
podría complicar la gobernabilidad, más allá de la coyuntura financiera.
En definitiva, el éxito del plan económico de Milei depende de esta
barrera de liquidez: si es sólida, otorgará estabilidad hasta octubre;
si resulta insuficiente, las tensiones cambiarias podrían precipitar una
crisis de magnitud. En rigor, los muros no solo delimitan: en
ocasiones, son la última línea de defensa frente a la incertidumbre.
De qué está hecho el paquete teórico del FMI de u$s20.000 millones
El
paquete financiero con el FMI alcanzaría los u$s20.000 millones,
combinando dinero fresco y refinanciación bajo un esquema que incluye
algo parecido al "Plan Brady 2.0". Este plan reestructura el acuerdo
firmado en 2022, devolviendo al Gobierno aproximadamente u$s4.000
millones en fondos de libre disponibilidad –equivalentes a 3.100
millones de Derechos Especiales de Giro (DEG) pagados en el último año–
para fortalecer las reservas del Banco Central sin aumentar la deuda
total con el organismo.
A esto se sumarían entre US$1.658 y US$4.658
millones adicionales de dinero fresco, llevando el desembolso inicial a
un rango de u$s5.000 a u$s8.000 millones, destinados a apuntalar la
transición hacia un tipo de cambio unificado y eliminar el cepo
cambiario. El resto, cerca de u$s12.000 millones, se destinaría a
refinanciar vencimientos previstos entre 2026 y 2029, bajo la tasa del
5,63%.